Cada segundo y cuarto viernes de mes, algunos hombres y mujeres de los servicio de ocio de la Fundación Luisa Oller van en el obrador de chocolate de la empresa y entidad social Hay Somos. Algunos ya hace cuatro años que trabajan con este alimento y se han convertido en unos expertos, haciendo talleres para grandes empresas. Es un espacio de ocio que trabaja las socialización en un ambiente relajado y que lucha por romper los estigmas que rodean el colectivo de personas con discapacidad.
Josep Teixidó es quien los ha convertido en amantes y expertos del cacao. Él, junto con un grupo de familias, comenzaron la aventura de esta entidad que trabaja por la inserción laboral de personas con riesgo de exclusión social y lo hace trabajando en red con otras entidades de la comarca.
¿Qué se hace en el taller de chocolate?
Lo que hacen básicamente es participar en la elaboración de bombones, tabletas de chocolate, turrones y todo lo que hacemos en el obrador diariamente. Van aprendiendo y terminan compartiendo todo el proceso de elaboración.
Aparte, nosotros ofrecemos talleres a empresas y familias y hacemos alguna muestra gastronómicos y siempre me llevo alguno de los chicos y chicas para hacerlos conmigo.
Cuando empezaste con este taller?
Abrimos el obrador en 2016, pero ya desde de 2015 hacíamos talleres en La Païssa. Hay personas del Vivero que llevan desde el inicio. Es genial ver que siguen viniendo a pesar de tener sus respectivos trabajos ya que aquí también trabajan ya buen ritmo, pero aún venir cansados lo disfrutan mucho, sobre todo cuando hacemos talleres fuera.
¿Qué les aporta esta actividad?
Es una gran herramienta de inclusión social. Es emocionante cuando en los talleres ves como una persona que está etiquetada como "discapacitada", está enseñando a un directivo de una gran empresa a manejar los utensilios.
Aparte, aquí se ha creado un espacio relajado que permite que se relacionen unos con otros fuera del trabajo. La idea es mezclar gente siempre y conseguir romper con todos los estigmas.
Aparte de pasarlo bien, en este taller están aprendiendo. ¿Qué evolución has visto?
Ahora ya son unos grandes expertos en hacer tabletas de chocolate. Han evolucionado mucho y siempre quieren aprender más.
¿Qué te aporta a ti hacer este taller? Recomendarías a otras personas animarse a hacer talleres con las personas de la Fundación Luisa Oller?
Nosotros tenemos voluntarios también y muchas veces cuando terminan te dan las gracias por la oportunidad de participar ya que descubren todo un mundo. Es un sector de la sociedad muy estigmatizado y compartir espacios con ellos es una tarea muy agradecida que te acaba volviendo más de lo que mujeres.
Puedes conocer más del proyecto de Hay Somos aquí.
Si quieres hacer un voluntariado de ocio con personas con discapacidad, contacta con voluntariat@vivelloc.cat