Nos encontramos ya en la segunda semana de confinamiento. Durante los primeros días hemos intentado acostumbrarnos a esta nueva forma de vivir, hemos tratado de seguir con normalidad pero a la vez re-organizando toda nuestra vida para poder adaptarnos. Pero llega la segunda semana y según los expertos a partir de aproximadamente el día 10 la situación se hace más difícil. Es por ello que habréis leído muchos consejos y recomendaciones de profesionales para llevarlo de la mejor forma posible.
Es una situación inesperada y sin una fecha clara de finalización, y esto añade un punto de incertidumbre que no siempre es fácil de gestionar. Además, hay una saturación de información y esto nos provoca una sensación de estar en alerta durante parte del día.
Si me permiten, y con toda la humildad del mundo, a tratar de dibujar algunas estrategias que nos pueden venir bien para afrontar mejor esta segunda semana:
- Una de las cosas más importantes es aceptar la situación porque es obvio que no podemos cambiar, sólo podemos contribuir a mejorarla quedándonos en casa pero no podemos borrarla y hacerla desaparecer. No depende de nosotros solamente. Pero lo que está en nuestras manos, lo tenemos que hacer, como quedarnos en casa. Para que esto nos dará cierta sensación de control, en parte. También tenemos que aceptar que la situación es incierta, cambiando, y que hay muchos elementos que no podemos predecir. Es importante que no nos quedamos "enganchados" pensando sobre estos aspectos, es mejor que pensemos en el corto plazo, en lo que haremos hoy, mañana y tal vez pasado mañana, pero no intentar pensar a medio y largo plazo. Si nos venden pensamientos de incertidumbre sobre dentro de unas semanas o meses, es mejor que los dejamos pasar y que no nos "pegamos" a ellos, sino concentrarnos en alguna otra cuestión.
- Otro aspecto importante es el de las rutinas y los horarios. Todas y todos hemos leído que hay que establecemos unas mínimas rutinas y horarios para dormir, comer, hacer algunas actividades y trabajar desde casa. Pero también debemos ser flexibles y que encontramos ratos para hacer cosas que nos proporcionen placer y que normalmente no solemos hacer por falta de tiempo. Hay que miramos la parte positiva: ahora tenemos más tiempo para estar con la gente de casa.
- Asimismo, también es importante tener espacios y momentos de intimidad. De aquellos que normalmente tenemos pero ahora, al estar en casa todos juntos durante el todo el día, se reducen. Y hay que encontrarlos.
- Es importante que durante el día podamos hacer también un poco deactividad física, Poder ser evitando que sea a última hora de la tarde / noche; de esta forma estaremos cansados y podremos descansar bien a la vez que nos sentiremos mejor y cuidaremos también nuestra salud física.
- También es importante poder tener una hora bastante fija de quitarnos y, a poder ser, que no sea un hora más allá de las 9 de la mañana, ya que esto nos ayudará a aprovechar nuestros ritmos biológicos ya que el estado de ánimo sea más estable.
Y ahora que hemos hablado de estado de ánimo ... ¿Qué pasa si un día estoy más decaído? Es normal? Por supuesto que lo es.
La situación que vivimos no es fácil y no estamos acostumbrados. Es por eso que es posible que aún notamos más los altibajos emocionales. aquí es importante recordar una regla de oro: el estado de ánimo no mejora solo. Si nosotros nos activamos, el estado de ánimo mejorará y entraremos en un espiral positivo; en cambio, si nos deja inactivos entraremos en un espiral negativo que hará que no se vaya este estado de ánimo bajo o deprimido.
También es importante que pueda hablar con las personas que tiene alrededor, Expresarlos como se sienta, explicar lo que piensa; tanto con la gente de casa como con vuestros familiares y amigos que no están en casa. Es importante no perder el contacto y puede planear encuentros online con personas que hace tiempo que no ve, con los compañeros de trabajo o de alguna asociación de la que formas parte y ahora mismo no te puedes reunir presencialmente.
Por último, es importante que entendemos que esta situación es temporal y que acabará en algún momento, por tanto, recuperaremos nuestras vidas. Volveremos a poder encontrarnos con nuestra gente, abrazarlos y volver a disfrutar de los pequeños placeres del día a día.
Pero vamos más allá. A pesar de ser una situación difícil, también hay una parte positiva que no podemos obviar y que debemos aprovechar: hemos pasado a compartir más tiempo con los de casa; hemos pasado a valorar más las cosas del día a día que nunca hubiéramos pensado en no tener; todos hemos visto como mucha gente se ha movilizado y estamos viendo iniciativas solidarias por todas partes.
Si tras seguir estos consejos aún tienes dificultades para afrontar con normalidad esta situación y piensas que necesitas ayuda, el Colegio de Psicólogos de Cataluña ha creado un teléfono donde puedes llamar y recibirás asesoramiento psicológico gratuito. El horario de atención es de 9:00 a 20:00 h, incluidos fines de semana, y el teléfono de contacto es: 659 584 988.