Una historia de superación personal

La Dolores nació en junio de 1969 a un pueblo de la provincia de Jaen. Es la pequeña de 4 hermanos, todos hombres. Su madre limpiaba en las casas del pueblo mientras su padre trabajaba en la construcción. Describe su infancia como muy dura. A los 8 meses de vida le diagnosticaron epilepsia y lo pasó muy mal. En el pueblo no la podían tratar y tenían que ir a Madrid a casa de una prima, cada 3 meses durante 14 años.

Mientras estaba en el pueblo vivía con la abuela y la madre ya que su padre fue a trabajar a una mina en Asturias; desde se que ella era pequeña y los hermanos se pusieron a trabajar muy jóvenes. Ella recuerda que siempre estaban con los pastores y que los hermanos trabajaban ya la hora la vigilaban ...

A los 5 años vino a vivir a Mataró y el padre pudo venir también de Asturias. Uno de los hermanos se fue a Ibiza y los otros fueron con ella. En Mataró fue a la escuela hasta los 17 años. Con 18 años empezó a hacer prácticas de peluquería y comenzó a trabajar hasta los 23. Con esta edad no le quisieron renovar el contrato, ya que había comenzado a beber.

¿Por qué empezó a beber? Pues porque siempre se había sentido muy rechazada por todos, sobre todo para la familia, que siempre le habían dicho que era muy fea y que no valía nada. Además los 18 años conoció a Paco a una discoteca y comenzó a salir con él. Siempre que salían juntos bebían y con los problemas que tenía en casa, el alcohol era una buena manera de alejarse de todo.

Con 25 años se quedó embarazada, durante el embarazo no pudo dejar de beber y estuvo ingresada un tiempo en el hospital antes de dar a luz. Con 26 años nace Ignasi, sano, aunque con poco peso, estuvo 3 semanas en incubadora. El niño estaba todo el día en casa la abuela. Siempre estaba con ella ya que los padres no podían cuidar, bebían demasiado. La Dolores siempre ha dicho que su madre nunca la ayudó a recuperarse ya que siempre le decía que era una muy mala madre y volvía a llevarse al niño.

Hasta los 7 años Ignasi estuvo siempre con la abuela, hasta que la madre de la Dolores se fue a vivir a otro pueblo. El año que la abuela se fue una trabajadora social fue a hablar con la Dolores argumentando que niño no estaba bien cuidado. Decía que no estaba bien alimentado, que tampoco tenía una buena higiene. Su cuñado, el hermano del marido, la había denunciado. Argumentaba que la habían visto un día por la calle muy bebida y con el niño. La policía terminó yendo a casa y los llamaron a juicio. Sólo se presentó ella, el marido no. Aquel día se quedaron el niño los servicios sociales. Cuando volvió a casa el marido se enfadó con ella porque venía sin el niño. Decía que ella era una mala madre y la culpable de todo, le decía que era una imbécil y que todo lo que le pasaba al niño era culpa de ella. Decía que ella era la madre y que era su obligación cuidar del pequeño. Llamó tanto y dar tantas veces que los vecinos avisaron a la policía. Ese día el niño fue a Barcelona. Cuando la abuela se enteró de todo lo que había pasado la llamó para insultarla y decirle que todo era culpa de ella.

Al cabo de una semana la llamaron para que lo pudiera ver. Sólo podía ver durante veinte minutos y sólo podía ser una vez por semana, los viernes. Durante ese tiempo ella estaba siempre sola en casa, el marido era el bar. Ella se quedaba sentada en el parque viendo pasar las horas. Sólo podía seguir bebiendo. En 2002 muere su padre, más motivos para seguir bebiendo.

En 2003 murió su marido después de tomar mucho alcohol y tabaco. A la autopsia le encontraron más drogas pero dice que nadie le explicó qué drogas eran. La familia del marido decía que ella había matado a su hombre y estuvo 24 horas cerrada pero se demostró que no fue así. Después de todo esto la madre le obliga a ir a vivir con ella, ésta, ya tiene otra pareja que le hace de padre a la Dolores en estos momentos difíciles. En el año 2004 la obligaron a ver a una trabajadora social para poder ir al CAS (centro de drogodependencias) y dejar el alcohol. Al CASO la ayudaron muchísimo y en 2005 decidió dejar definitivamente de beber, necesitaba hacer un cambio y empezar una nueva vida.

El Año 2005 es el año que ella decide dejar de beber y también el año que acogen a Ignasi con una familia. Ella de esta familia dice que no los conoce demasiado y que no tiene relación pero que está muy agradecida porque han criado a su hijo. Durante estos años pudo ir viendo a su hijo con visitas de 20 minutos pero siempre con supervisiones de otras personas. Normalmente iba con la madre y la pareja de ésta.

En 2007 comienza a trabajar en el CET (Centro Especial de Trabajo) Viver de Bell-lloc. Ir a trabajar en el CET significa volver a trabajar después de muchos años y con un nuevo sector del que no sabe nada. Conocer gente nueva, ganar dinero, estar ocupada, ... .y sobre todo, no ocuparse del alcohol. Es entonces cuando la madre le comunica que marcha en Andalucía de nuevo y que ella se quedará sola. Es entonces cuando pide entrar a vivir en el hogar-residencia.

En febrero del 2008 entra a vivir en el hogar. Dice que al principio era como una casa de locos, un lugar donde todo el mundo se peleaba y los platos volaban. Con el tiempo todo fue a mejor y fue conociendo las personas que vivían en el hogar. Se empezó a relacionarse también con los educadores y todo comenzó a funcionar bien por primera vez. En el hogar conoció a una persona muy especial, una persona que le hizo lado en todo momento y se convirtió en un amigo muy especial e inseparable, pero por sus enfermedades, el año 2012 muere.

Poco a poco todo va a mejor, el trabajo sigue en marcha y sigue haciendo seguimiento al CAS y al CSMA (Centro de Salud Mental). Todos los profesionales hablan de una gran evolución en todos los sentidos y poco a poco se va retirando medicación psiquiátrica. Ella también nota que cada vez está mejor. Aunque el gran cambio dice que fue en el trabajo, en el año 2013, cuando empezó a hacer prácticas en La Tavella. Allí le enseñaron a hacer cestas y pesadas. Iba dos días allí y eran los mejores días de la semana. Y poco a poco se convirtió en su lugar habitual de trabajo.

Durante estos años ella había ido viendo a su hijo cuando la madre venía de Andalucía ya que seguía sin poder ver a solas. Es entonces cuando el niño hace 18 años y decide no verla más. Él dice que no quiere saber nada de ella y las visitas ya no eran obligatorias. En este momento la Dolores sólo puede sentirse decepcionada. Tiene la sensación de que nunca más volverá a ver a su hijo. Cree que durante estos años ha estado haciendo las cosas bien pero quizás no suficiente para su hijo.

El once de noviembre es una fecha muy especial, fue al CAS y allí le dieron el alta. Por fin, había superado una grandísima barrera.

Todo sigue adelante y la Dolores cada vez es más feliz. En febrero del 2014 Ignacio empieza a hablar con ella. Es la madre de la Dolores la que convence al niño para que la llame. La primera llamada duró 25 minutos. Fue una llamada muy emocionante. Se estuvieron llamando hasta el 17 de julio que él la vino a visitar. Fueron a comer juntos fuera. Estuvieron todo el rato hablando y sólo de cosas positivas, de su relación y del futuro. Íñigo le explicó que decidió llamar para que se enteró de que la abuela y la familia del padre lo habían estado mintiendo durante muchos años. Le habían estado diciendo que ella lo maltrataba y no era cierto.

Actualmente Ignacio llama a la Dolores tres veces por semana, le cuenta lo que estudia, que hace deporte y mantienen una gran relación. Él sigue viviendo con la familia de acogida. Las visitas al CAS ya no existen y las del centro de salud mental cada vez son más espaciadas. La Dolores dice que ahora si que es feliz. [Hr style = "solid | dash | dot"]
Para preservar la intimidad de los protagonistas de esta historia hemos ficcionado los nombres y otros datos no relevantes.

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